El envejecimiento es un proceso natural, lejos de intentar frenarlo, debemos centrarnos en cuidar la salud para disfrutar plenamente de esta maravillosa etapa de la vida, la tercera edad.
Las personas mayores tienden a sufrir más enfermedades y problemas de salud crónicos. Síntomas músculo-esqueléticos, como dolor de espalda, dolor articular, osteoporosis, artrosis,.. son las causas más comunes de discapacidades y disfunciones entre la población comprendida dentro de la tercera edad.

Quiropráctica y tercera edad

En algunas culturas, el envejecimiento se ve como una virtud, la experiencia de la edad se valora por encima de todo y existe un gran respeto hacia los ancianos. Por el contrario, en el mundo occidental, la vejez se percibe como una enfermedad. Cuando una persona se hace mayor, pasa a ser considerada un estorbo para la sociedad y por desgracia, muchas personas ven el fin de sus días en asilos u hogares para ancianos.
Por suerte, la quiropráctica da la oportunidad a que las personas mayores no renuncien a mantener su actividad y  puedan seguir disfrutando de su vida cotidiana con total autonomía. Los ajustes quiroprácticos corrigen cualquier interferencia que se pueda tener a nivel espinal, y en consecuencia, garantizan el buen funcionamiento de los músculos, articulaciones y nervios, sin dolor que impida llevar una vida sana y activa.
Beneficios para la tercera edad
En resumen, recibir regularmente cuidados quiroprácticos, reporta los siguientes beneficios para las personas de la tercera edad:

• – Disminuye los síntomas,
• – Mejora la calidad de vida,
• – Reduce las necesidades de medicación y hospitalización,
• – Disminuye las enfermedades crónicas,
• – Permite mantener la activad y autonomía,

Quiropráctica: ¿es adecuada para la tercera edad?

Mucha gente suele asociar la quiropráctica con el crujido de los huesos, lo que les lleva a pensar que es una técnica muy agresiva para las personas mayores.
Sin embargo, la quiropráctica tiene un enfoque más conservador que otros tratamientos como los fármacos o la cirugía, y además sin efectos secundarios. Los cuidados quiroprácticos  respetan la fisiología natural, adaptándose a las necesidades individuales de cada persona.
Por lo tanto la quiropráctica es perfectamente adecuada a las personas de tercera edad.
Para concluir, me gustaría citar a Abraham Licoln,

“Al final, no cuentan los años en tu vida, cuenta la vida en tus años.”

 
La tercera edad nos brinda infinitas posibilidades, la quiropráctica te permite disfrutar de esta etapa, añadiendo así más vida a tus años.
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Referencias:
1. Coulter I.D. Quiropráctica se acerca a la salud y la curación. Los avances de la Quiropráctica, 1996; Vol.3, Mosby-Year Book, Inc.
2. Rupert RL, et al. Cuidado de Mantenimiento: servicios de promoción de la salud administrados a pacientes de quiropráctica de Estados Unidos mayores de 65 años: Parte 2. J Physiol Manipul Ther 2000; 23:34-41
3. Hawk CK, largo CR, Boulanger K, Morschhauser E, A. Fuhr Cuidado quiropráctico para pacientes mayores de 55 años: Informe de un programa de investigación basado en la práctica. JAGS 2000; 48:534-545.
4. Coulter ID, Hurwitz EL, Aranow HU, Cassata DM, Beck JC. Top quiroprácticos Clin 1996; 3 (2) 46-55.
5. Killinger LZ. Técnicas de ajuste quiropráctico en el cuidado de pacientes de avanzada edad . En: Redwood D, y Cleveland, CC III, editores. Fundamentos de texto quiropráctica. Mosby Editores. 2003
6. Killinger LZ, Cooperstein R. Técnicas quiroprácticas para pacientes geriátricos. Actas de la Conferencia Internacional de la Asociación de Quiroprácticos de Lisboa 2000.
7. Killinger LZ. Ajuste quiropráctico y el paciente envejecido. J Amer Chiropr Assoc. Noviembre 2003, 40 (11): 26-28.

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